Trabajamos a múltiples escalas, desde la local hasta la global, para garantizar que los arrecifes de coral prosperen para las generaciones venideras.
Cuando reducimos las amenazas a nivel local para los arrecifes -como la contaminación, la sedimentación, la sobrepesca o el turismo insostenible-, los arrecifes son más saludables y más capaces de resistir los efectos del cambio climático, como el blanqueamiento de los corales y la acidificación de los océanos. Por ello, trabajamos en colaboración con las comunidades locales, las organizaciones sin ánimo de lucro, científicos, el sector privado y los financiadores para crear sistemas de gestión eficaces y sostenibles que garanticen la prosperidad de los arrecifes.
CORAL trabaja para salvar los arrecifes de coral en dos regiones del mundo de importancia crítica:
Hawái
Nuestro trabajo en Hawái se centra en garantizar que los arrecifes de coral tengan el agua limpia y clara que necesitan. Hawái tiene uno de los mayores endemismos marinos de la Tierra y cerca del 85% de los arrecifes de coral de Estados Unidos.
Región Mesoamericana (SAM)
Nuestro trabajo en la Región Mesoamericana (SAM) se centra en la creación de asociaciones con comunidades y organizaciones locales para reducir las amenazas locales a los arrecifes. El SAM alberga la segunda barrera de coral más grande del mundo y se extiende por las costas de México, Belice, Guatemala y Honduras.
A nivel mundial, hemos puesto en marcha una nueva era de conservación de los arrecifes que se centra en reducir las amenazas a los arrecifes para que puedan adaptarse al cambio climático y proporcionar nuevos conocimientos científicos sobre la evolución de los corales.